Nueva Masterclass ACADP
23 de octubre de 2023Juegos de verano y la doble oportunidad: desarrollo infantil y alejarse de las pantallas
Una de las mejores maneras de fortalecer la relación entre adultos y niño/as, así como entre los propios pequeño/as, y a la vez promover un aprendizaje mutuo es a través de los juegos.
Tomándose las cosas de esta manera, los chicos y chicas aprenderán muchas cosas poniendo la atención necesaria, sin verlo como una obligación. Además, jugar con ello/as es el método ideal para fomentar su creatividad y favorecer el desarrollo cognitivo.
El juego es imprescindible para el desarrollo de las habilidades físicas y psicológicas de los niño/as y en cada etapa es un indicador de las destrezas que se van consolidando.
El juego según la edad del niño/a varía y se vuelve elemento indispensable para el desarrollo de habilidades y destrezas. Aunque pareciera que su único fin es el entretenimiento, en realidad el juego en el niño/a desempeña un papel principal en su proceso de aprendizaje y adaptación a la vida.
A través de estas actividades se genera un estímulo que fortalece las destrezas motoras, la autorregulación y las competencias sociales. Además, se convierte en el medio favorito de los menores para exteriorizar sus miedos, alegrías y necesidades. Debido a esto, cada edad tiene un tipo de juego característico, que surge de forma espontánea conforme va explorando y aprendiendo.
¿Por qué es tan importante conocer su evolución? Pues bien, sea cual sea la actividad, las madres y padres siempre serán una guía. Por esto, es fundamental que cada uno se involucre en el juego y sus respectivos cambios.
Hay muchos juegos con los que entretener y enseñar a los niños, pero entre los más positivos están los que se desarrollan al aire libre aprovechando la época del año y las temperaturas templadas, alejados de pantallas, consolas y otros aparatos, donde los niños y niñas deberán interactuar tanto con las personas que le rodean como con el entorno.